Desde el balcón
Soy una astilla del árbol que voló en llamas. Soy la ceniza tras el cielo de chispas iluminado. La pregunta que pide cuentas por el despilfarro y el destrozo, la nada cortante que responde. No es haberte perdido: es haber muerto entre espasmos con esa pérdida y verte tan jodidamente indemne. Tú, desde el balcón, viste como sucedió todo. La demente se arrojó del piso 10 porque alguien dijo que tenía alas. Ella creyó, y bailó en el aire un microsegundo antes del vértigo y el terror. Luego los huesos tendieron hacia abajo, y sonó nada más que el crujido del invierno abierto.
Tú, desde el balcón, presenciaste el vuelo malogrado, miraste la hora, anotaste la fecha y te tragaste un cigarro.
Un día pasas por la vereda y te tropiezas con el cuerpo. Tú, como buen ilusionista, disparas un chiste (estallan las risas), haces una maroma y sacas del bolsillo una mariposa muerta, un conejo y una ardilla.
Y partes, sonriente, amnésico, hacia la vida.
Fue la cronopio a las 9:35 a. m.
15 Salenas, treguas y catalas:
Me encandiló tu poema en prosa.
uffff...me parece que el amnésico sólo lleva disfráz..la memoria se esconde pero no desaparece...
cariños a granel Xime, un abrazo y un beso de aniversario
Lo complicado es la muerte a espasmos... mejor acabar con todo de una vez.. lamento lo indemne...
hermoso sobre la muerte que llegue silenciosa y que llegue en un sueño
Reconozco esa sensación de muerte que supone lanzarse desde el piso 10, la siguiente muerte llega cuando miran tu cadáver en el suelo con indiferencia... sólo queda levantarse con una sonrisa irónica y que quien se fume el cigarro sea una misma... jeje.
Besossssss cronopios!!!
Lo que cuenta es el salto al vacío, el riesgo, como actitud, como metáfora de jugársela. Después salimos, a tientas, pero salimos hacia un lugar más puro. Yo he visto, de vez en cuando, a un amnésico como el que mencionas,...y el muy hijo de...también se ve así: 'jodidamente indemne'.
Hermosas palabras para nombrar ese dolor
hacia rato q no entraba a blogs....y siempre es un placer llegar a este...
Uf. Siempre creemos en las alas pero no les damos tiempo a crecer.
Un abrazo grande (contención pura)
quizás sea al menos un paliativo decir que si volamos porque creemos, aunque sea un instante de todos esos podrá convertirse en nuestra fotografía favorita. quizás no sea lo correcto vivir una farsa, pero muchas veces no hay más remedio y mientras tanto, somos tan libres...
la caída siempre duele, siempre presente, siempre remitente. pero quizás, él, desde su no-ser, viva dentro de una fantasía también, y quizás, no sepa de dónde tirarse para terminar con ella o no tenga el coraje suficiente para hacerlo.
creo, nena, que el más perjudicado por el golpe, aunque de forma invisible, es el. porque a vos te queda una herida que en algún momento cicatrizará, pero también te quedará un cuento pulido, y minuciosamente construido para sanear un mañana a partir de un hoy. pero a él, solo le quedará el vacío de sus días contandos sin saberse siquiera persona.
beso.
La ingenua muerte fue hermosa aquí, al menos voló unos segundos...
Saludos
Hay otros saltos al vacío...
de esos que añoran sentir cómo el viento te arranca una lágrima y la vida....
mire este video por el que, luego de leer tu post, comprendí lo que se siente cuando en la vida ocurren las coincidencias...
http://www.youtube.com/watch?v=gzicZPnd6kU
Uy. Pobrecilla. Ojalá nadie, ni siquiera ese prestidigitador, sea capaz de quitarte lo comido y lo bailado.
Me pregunto si serviría de algo disfrazarse (¿Entiendes?. ¿Recibiste mi correo-invitación?)
Perplejo
http://dragonperplejo.blogspot.com/
me quedo con la actitud, la valentìa, el riesgo, que más da si hay alas o no, lo importante es a veces que creamos tenerlas, que eso nos mueva hacia algún lugar soñado
saludos
Hay corazones que desconocen las leyes de la aerodinámica.
Y hay corazones tramposos que esconden en la espalda,la ley de gravedad.
Abrazos y alas
Una vez jugué a no dar explicaciones y pagué caro por ello.Una vez jugué a sentirme lastimada y era yo quien lastimaba más. Una vez jugué a sentirme sola, y era yo quien más se alejaba. Una vez jugué a jugar y me caí como una niña. Una vez también quise querer... Saludines de la nueva integrante del club.
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