Náusea

"Será que la necedad parió conmigo
la necedad de lo que hoy resulta necio
la necedad de asumir al enemigo
la necedad de vivir sin tener precio."

Silvio Rodríguez


No es que los intereses mezquinos nos hayan jugado la peor mala pasada en mucho rato. No es la falta de rigor o de excelencia. No es que un gran señor y rajadiablos se ponga la banda como quien se compra un país. No es que nos mientan en la cara, se olviden de lo que recordamos, se llenen los bolsillos cuando vuelan sus acciones.

No es que nos nieguen la pastilla, nos reduzcan los sindicatos, nos obliguen a rezar al pie de su cruz y su intolerancia.

No es que quieran comprar nuestros cargos, nuestras habilidades o nuestras conciencias. No es que nos ofrezcan el doble y más, de puros desesperados. No es que nos usen, ni que nos exhiban como trofeos de lo unitario.

Es que nosotros, los que decíamos creer en algo, estemos dispuestos a abrir la mano para servir al interés contrario. Es haber gritado porque no daba lo mismo chana que Juana y ahora decir que todo eso son matices técnicos. Es contarnos razones, buenas, medianas o pésimas, para ocultarnos un hecho terrible: tenemos precio.

Es haber perdido tanto y tanto, que ni siquiera nos importe que se nos caiga la decencia de entre los dedos.

Cronopio furioso, escuchando El Necio (Silvio Rodríguez)